Por cada novio que me traicionó o por los que simplemente desaparecieron o me hartaron, siempre escuchaba el sabio augurio de alguna buena amiga: “un día…
Por cada novio que me traicionó o por los que simplemente desaparecieron o me hartaron, siempre escuchaba el sabio augurio de alguna buena amiga: “un día…