Gracias a mi hermana, te quiero.
A veces tan iguales y otras tantas tan diferentes. Dicen que quien tiene una hermana tiene un tesoro. Digamos, que es mucho más que eso, es un mapa, y que cada momento con ella es un pequeño tesoro que vas encontrando y guardando. Y que, un día, muchos años después, te das cuenta que todo ese tiempo juntas es la fortuna de tu vida.
Ella es tu pilar, en los malos momentos y en los buenos. Porque las grandes noticias también hay que compartirlas, y sobre todo, celebrarlas. En eso sois más que expertas. Ella es tu compañera de juegos y hazañas, será quien te guiñe un ojo jugando al mus y quien se ría ante tu chiste malo. Es quien respalda tus malas decisiones. Porque sí, porque sólo sois dos chiquillas jugando a equivocarse.
Y los errores de la otra te harán aprender más que viviéndolos en carne propia.
Será quien se monte en el sillín de atrás de la bicicleta y el primer copiloto ante tu carnet de coche recién aprobado. Quien te cogerá el teléfono a las tantas de la mañana, quien te apoyará ante tus ideas más locas. Será quien se inventará la coartada perfecta y guardará tus mayores secretos. Quien te ayude a enterrar el cuerpo si algún día se te va de las manos. Es broma, pero sabes que podrías contar con ella.
Será ella, quien no disimule cara de disgusto ante tu nuevo look. La que te diga alto y claro que esa nueva falda que te has comprado hace que parezcas una mesa camilla. Será quien eche la sal y el azúcar cuando pongas las manos en la masa, y quien se coma el primer trozo de tu nueva receta culinaria. Será ella quien comparta todos tus logros, y los que no lo son tanto, pero quién convenza a los demás de que lo son. Será ella, quien se tire contigo a la piscina, quien salte las olas del mar, quien escale montañas. Como leí hace un tiempo, en las cookies de la vida las hermanas son los trocitos de chocolate.
Y más de un día la encontrarás revolviendo tu fondo de armario. Verás sus fotos y pensarás, ¡anda, se ha comprado la misma camiseta! PERO NO, porque eso, y eso, ¡y eso! Y ESO QUE LE DIJE QUE ES NUEVO. Todo eso, es tuyo. Y se lo ha puesto sin tu consentimiento. Porque así son las hermanas, en lo bueno y en lo malo, un matrimonio especial para el resto de tu vida. Y te quitará la razón, te cerrará a puerta en tus narices, te esconderá el cargador de tu móvil allí donde no puedas encontrarlo. Porque ella sabe todo lo bueno, pero también sabe todo lo malo. Sabe tus puntos débiles pero desconoce que ella es uno de ellos.
Y ante esto, no puedes más que sonreír.
Era quien te pedía que jugaras mientras tú pensabas en muchas otras cosas que aún le quedaban por vivir. Y ahora eres tú, quien no quieres aceptar que sea ella quien las esté viviendo. Porque es tu hermana, esa personita que un día, de repente, comenzó a formar parte de tu vida. Ella, quien correteaba contigo por los pasillos de la casa, y pensabas que nunca iba a crecer. Y para ti, de algún modo, nunca lo hará. Es tu hermana, tu hermana pequeña, a quien tienes que proteger de absolutamente todo, porque tú eres su cobijo frente al frío. Y es tu hermana mayor, quien se preocupa hasta el punto de ser la persona más pesada del mundo. Quien se pelearía con cualquiera que se metiera contigo, mafia rusa incluida.
Habrá tantos y tantos momentos que la necesites. Te darás cuenta de lo mucho que te importa su forma de pensar, de lo mucho que esperas su visto bueno. Que su aprobación para ti es esencial. Y, te diré algo, siempre una de las dos se hará la interesante cuando le pidas un abrazo.
Por eso, hoy se lo vas a recordar, porque a pesar de que la veas demasiado o no lo suficiente. A pesar de que esté en ese momento que sólo piensa en los amigos o que ya tenga su propia familia, ella es la tuya. Y ese, será el mejor regalo que pueda hacerte jamás. Eso, y su nueva camiseta tan mona que te prohíbe poner.
Para mi hermana, siempre que caigas yo estaré ahí para recogerte, después de acabar de reír.
No te imaginas lo mucho que me has emocionado con esta entrada y lo identificada que me he sentido… Por si te apetece echarle un vistazo, te dejo el enlace de lo que le escribí yo a «mi pequeña viruta», para que veas que hay más de una coincidencia! 😉
Ánimo y gracias por escribir tan bonito!!!
La relación de hermanas es mágica e incomparable. Yo también escribí sobre ella. Te dejo el enlace.
Un abrazo fuerte.
Muy bonita la entrada, la verdad! Has sabido transmitir lo que tu hermana significa para ti y encima muchas personas nos hemos sentido identificadas! Lo de la ropa es la pura realidad jajajaja
Qué cosas tan maravillosas que te hacen emocionarte!. Gracias por tu sensibilidad.
Tu blog es lo más maravilloso que he leído en años, y este post…qué decir de este post que se lo he dedicado a mi hermana, a mi pequeña,..quisera saber cómo haces para leer en el alma de la gente. Tienes una seguidora incondicional más.